Pelar el diente de ajo, pinchar y frotar en el caquelón. Pelar el queso Gruyere y rallar con la parte gruesa del rallador. Hacer lo mismo con el queso Talhuet. Reservar. Ralle igualmente el queso azul. Incorporar los tres quesos en un bol amplio y mezclar muy bien. Verter en el caquelón el vino blanco seco. Luego apoyar sobre el calentador encendido. Cuando el vino comience a hacer burbujitas echar una pequeña porción de los quesos y revolver con cuchara de madera en forma de 8. (Es importante revolver de esta forma para que los quesos no se aglutinen) Seguir incorporando los quesos de a poco mientras se sigue revolviendo. Agregar a esta preparación el Kirsch y continuar revolviendo siempre en forma de 8, hasta que el queso esté bien disperso. Disolver la fécula de maíz en un pocillo de vino blanco. Agregar la fécula y continuar revolviendo de la misma manera, hasta que todo esté ligado y se forme una crema lisa (llevará entre 20 y 30 minutos de cocción en total)

Una vez obtenida la crema de queso, bajar la llama del calentador al mínimo y revolver la fondeu ocasionalmente, para que no se pegue en el fondo. Cortar en daditos el jamón, los pancitos en trozos, los nachos, las zanahorias, las salchichas, el pollo preparado,... todo dispuesto en cazuelas repartidas alrededor de la caquelón en la mesa. Cada comensal deberá contar con un pinche y varias servilletas!

Cortar las pechugas en trozos no muy pequeños teniendo en cuenta que al cocerlos siempre se reducen, de lo contrario no quedará un buen bocado para la fondeu. En wok o sartén, agregar un poco de aceite, calentar un poco y agregar el pollo para dorar. Unos minutos después, agregar la cebolla picada, el ajo y el morrón. Cocinar un poco más. Cuando empiece a largar juguito, salar, salpimentar, agregar el pimentón dulce y las hojitas de laurel. Tapar y cocinar a fuego mínimo un poco más. Reservar y calentar si es necesario un poco, antes de servir la fondeu.