Descarozar las cerezas, colocar en un recipiente alto con el jugo de los limones y el azúcar. Dejar macerar un día en la heladera. Al otro día, cocinar a fuego medio esta preparación cómo mínimo durante 60 minutos hasta que el líquido se reduzca y el dulce haga burbujas grandes. Revolver cada tanto con cuchara de madera y retirar con una espumadera la espuma que se forma en la superficie. Comprobar sobre un platito si la consistencia es adecuada para el dulce (al volcar el plato no se deslice el dulce tan fácilmente) Envasar en caliente en frascos previamente esterilizados, dejar enfriar y tapar. Conservar en ambiente seco y oscuro. En la heladera puede conservarse hasta 6 meses.

Descarozar las guindas y tomar la mitad para pasar por la licuadora. Colocar en una olla de preferencia de base gruesa o bien de acero quirúrgico, la fruta junto con el azúcar y algunos carocitos. Cocinar a fuego medio fuerte en principio hasta que hierva y luego reducir al mínimo sin dejar de revolver aproximadamente 2,30 horas. Retirar cuando en un platito de loza, el dulce ya frío casi no se mueve. Envasar en caliente, en frascos previamente esterilizados y tapar en frío.